miércoles, 15 de junio de 2022

Actividades FIn de Curso

Estamos llegando a final del curso 2021/22. UN año que, de nuevo, ha estado marcado por la pandemia de covid.

Sin embargo, ya estamos pudiendo realizar actividades con la comunidad educativa, por ello queremos que este fin de curso sea el REECUENTRO.

El próximo lunes, será el día de las Graduaciones de Infantil 5 años, en la Sala de Teatro de nuestro centro, a las 12:30.

La Graduación de 6º de Primaria, será el mismo día, pero por la tarde, a las

 19:00 h.

El 21 de junio será el día de nuestra Fiesta FIn de Curso, a partir de las 21:00h, con actuaciones musicales de todos los cursos.


El 22 de junio, tendremos el horario de 10:00 h a 13:00 h , estaremos realizando actividades recreativas, dentro del programa PROA+Transfórmate.


El 23 de junio, es el último día de clase con actividades deportivas y recogida de boletines de final de curso.


Esperamos vuestra asistencia.

Desde el claustro de maestros/as y personal no docente, os deseamos 

¡FELIZ VERANO!

Pacto Contra la Violencia de Género

 Nuestro centro viene participando en el programa Pacto Contra la Violencia de Género en los últimos cursos, realizando diversas actividades para tratar este tema con el alumnado y sus familias.

Este curso hemos querido dejar plasmado en frases sencillas, pero contundentes, este tema tan importante, por ello hemos llenado de color las escaleras y pasillos con mensajes muy claros.

Esperamos que os guste.

https://drive.google.com/file/d/1hWc_SOBodibZMuJbV2v7khSIjYeKK7OZ/view?usp=sharing

miércoles, 25 de mayo de 2022

Convivencia de los equipos directivos

 El viernes 20 de mayo, tuvimos una convivencia todos los equipos directivos de Valverde del Camino, junto a sus parejas e hijos/as.

El momento vivido fue muy emocionante, porque, una vez más, pusimos en valor la EDUCACIÓN en nuestra localidad, como muestra de convivencia y buena armonía entre los centros que componemos la Comunidad Educativa de nuestra localidad.

Todo un placer haberlos recibido, junto a la directora de CEPER El Pilar, en nuestra casa.

Ahora es importante seguir trabajando por una Educación que sea reflejo del buen hacer de todos los colegios e IES de Valverde del Camino.

LA EDUCACIÓN ES EL CAMINO PARA CONSEGUIR EL FUTURO, A TRAVÉS DEL PRESENTE, SIN OLVIDAR EL PASADO.

https://drive.google.com/file/d/1eCgfqFRC86BUeFGEB35e-SDGpJP89rnK/view?usp=sharing

El garbancito lechoso

Dentro de nuestras actividades previstas para tratar las emociones en nuestro  centro, el 19 de mayo tuvimos la presentación del libro "El garbancito lechoso", por su autora Libertad.

A través de un sencillo cuento, hemos tratado el posible rechazo que pueden sentir algunos niños/as, sencillamente por ser diferentes o porque no los quieren en el grupo. Ha sido un momento importante de ahondar en los sentimientos y emociones que puede sentir una persona cuando se siente rechazado, sin saber el porqué.

Esta actividad está englobada dentro de nuestros programas y  proyectos,, todos globalizados en el deseo de una convivencia en paz y buena armonía.

¡Enhorabuena a Libertad!

https://drive.google.com/file/d/1eAdXPnpMLtN28fVF6PaacB8s3ZCK1tAL/view?usp=sharing

miércoles, 18 de mayo de 2022

Información para los auxiliares bilingües

 Os pasamos un vídeo de información de nuestro centro, CEIP José Nogales, y nuestra localidad, Valverde del Camino, que puede servir para los nuevos auxiliares bilingües que vayan a estar en nuestro centro.

Agradecemos a nuestra auxiliar, Aaki, que ha confeccionado el vídeo y le deseamos mucha suerte para el próximo curso.

https://drive.google.com/file/d/1amkyc6w6kYg1ytsuggmvaDWqKep92Fhy/view?usp=sharing

https://drive.google.com/file/d/1amkyc6w6kYg1ytsuggmvaDWqKep92Fhy/view?usp=sharing

PROA +TRANSFÓRMATE

 Subimos al blog la 1º charla que se ha dado a las familias, dentro del programa de nuestro Centro.

Esperamos que sea beneficiaria para todos/as.








ATENCIÓN A LA DIVERSIDAD Y ACOSO ESCOLAR

 

ÍNDICE

 

 

1.    Qué es la diversidad

 

2.    Qué papel juegan las familias y el sistema educativo en su atención

 

3.    Acoso escolar y sus tipos

 

4.    Sintomatología del acoso

 

5.    Actuación familiar frente al acoso

 

6.    Visión del agresor

 

7.    Visión del agredido

 

8.    Actuaciones familiares que pueden propiciar el acoso

 

 

Qué es la diversidad

 

La diversidad responde a las diferencias que pueden existir entre las personas respecto a cultura, grupo social, género, religión, ideología o limitaciones físicas/psíquicas. Dentro del mundo tan diverso que encontramos, se lucha por conseguir la unión entre lo distinto, consiguiendo que lo diferente no suene a rechazo.

La atención a la diversidad busca la mejora de la autoestima y del autoconcepto mediante adaptaciones específicas que priman por el bienestar social y emocional de la persona. Ofrecer recursos y herramientas para que el mundo sea igualitario, con independencia de cómo seamos frente a los demás.

Dinámica grupal “No me definen las etiquetas”. Coloco dos botes pequeños. En uno de ellos pondré sal y en otro azúcar. Diferenciaré cada bote con su etiqueta respectiva para especificar qué hay en el interior.

Si elimino las etiquetas del bote, ¿quién sabe realmente lo que hay en el interior? Puedes pensar que en el bote 1 está el azúcar, pero también puedes equivocarte y que lo que esté sea la sal. Realmente nunca lo sabrás si no pruebas con el dedo un poco del contenido en el bote.

Con las personas ocurre lo mismo, sobre todo en el tema de atención a la diversidad. El tener una etiqueta específica no define como persona. Tener una discapacidad física o mental no te limita como persona. En muchas ocasiones hemos actuado como con la sal o con el azúcar. De forma previa hemos colocado una etiqueta, y hemos creído saber realmente lo que había dentro de esa persona. “Si va en silla de ruedas, ¿cómo ha sido capaz de hacer tal cosa?” “Si tiene síndrome de Down, ¿cómo ha sido capaz de estudiar?”.

Las etiquetas no definen a nadie. Es verdaderamente importante intentar conocer el interior de las personas para saber la valía.

 

Qué papel juegan las familias y el sistema educativo en su atención

 

Para atender la diversidad es importante el papel de la escuela y el de las familias. Aunque la escuela sea una importantísima base socializadora y educativa, es la familia el principal agente educativo y socializador. En la infancia es donde se producen los primeros retos y desafíos y es la familia quien mejor puede promover el desarrollo personal, social e intelectual. La familia es quien mejor, además, puede proteger de situaciones de riesgo a los niños.

La familia es quien imparte las primeras normas y valores. La escuela mantiene dicha continuación en el tiempo. Si no hay un trabajo conjunto de ambos agentes es difícil conseguir objetivos positivos.

En las escuelas, las pautas a seguir para el buen funcionamiento de la educación en la diversidad se encuentran:

-          Brindar atención personalizada al alumno. Todo alumnado debe obtener un aprendizaje, con independencia de su rendimiento cognitivo.

-          Diagnósticos de las dificultades del desarrollo en los alumnos.

-          Implementación de refuerzos educativos para llegar a los objetivos.

-          Medidas de intervención educativas y curriculares que dependerán de las dificultades que sean detectadas. Ej. : Apoyo en el aula, adaptaciones curriculares, agrupamientos flexibles.

Para el desarrollo personal del niño, tiene igual importancia la escuela como la familia. Son ambientes que se complementan y que afectan positiva o negativamente al niño. Las relaciones entre ambos agentes son fundamentales.

La atención a la diversidad adquiere mayor importancia en el caso de aquellos alumnos que acaben de incorporarse al centro, alumnos procedentes de otros países que no conocen el sistema educativo de nuestro país, alumnos con dificultad de aprendizaje o necesidades educativas específicas, alumnos con problemas de conducta o alumnos con problemas emocionales.

Por todo ello, es primordial que Escuela y Familia caminen hacia el mismo objetivo: el desarrollo integral del menor. Por lo que debe existir una comunicación fluida. A su vez, es necesario comprender y actuar desde el respeto en cada situación familiar, las posibles dificultades y tensiones existentes, animar a las familias a que refuercen sus apoyos sociales, familiares, ocio…

Es frecuente observar en familias donde hay niños con dificultades muy significativas, cómo reducen su círculo social y familiar. Todo gira en torno al problema y a las dificultades del niño, y se abandonan otras actividades que podrían mejorar la positividad familiar. Uno de las mejores soluciones en estos casos es conocer a otras familias que estén pasando por el mismo proceso, con quienes compartir miedos, inseguridades, pero también alegrías y vivencias inolvidables que permitan guardan en un cajón, al menos un tiempo corto, los pensamientos negativos.

 

Acoso escolar

 

Dinámica El billete: Cogeré un billete de 20 euros. Delante de los padres, preguntaré ¿Cuánto vale? A lo que todos contestarán 20 euros. Seguidamente, pondré el billete en la mesa y lo golpearé, ¿Cuánto vale? Preguntaré. 20 euros me dirán. Volveré a repetir el golpe del billete, lo arrugaré y volveré a preguntar: ¿Cuánto vale? 20 euros.

¿Por qué cuando nos insultan, nos agreden emocionalmente, creemos que valemos menos? El billete se ha modificado, le he golpeado y lo he estrujado con mis manos, pero no habéis dejado de creer que vale lo mismo por ello. Las personas somos como el billete. Por mucho que te pisen, por mucho que te golpeen, por mucho que te estrujen con palabras absurdas, tú no valdrás menos. Valdrás igual y eso es algo que debes tener siempre claro. Nadie debe decirte cuál es tu valor como persona.

Es en la adolescencia donde más prevalecen los miedos y las inseguridades. Los adolescentes se mueven en un contexto en el que los iguales adquieren un papel reconocido y donde la opinión, entre otros factores, determina la validez propia de sí mismo. Por ello, trabajar la diversidad y la empatía desde pequeños, reducirá estos sentimientos en la adolescencia. Desarrollar un trabajo precoz donde el respeto sea el pilar fundamental, mejorará la afectividad entre los iguales, la comprensión y el apoyo mutuo.

No obstante, el acoso escolar existe. Es una realidad que debe ser observada y analizada por el sistema educativo y por las familias. El acto de acoso responde a un comportamiento de agresividad, que se repite en el tiempo, que tiene una intención real y que se produce durante un período de tiempo prolongado. En la mayoría de los casos viene acompañado de desequilibrio de poder. El objetivo del acoso siempre es aislar, amenazar, insultar, someter emocionalmente a la persona.

No se nace siendo acosador. Es un modelo de aprendizaje, una respuesta a una estructura mental en la mente del niño. Por ello, el papel de las familias es verdaderamente importante. Ignorar el problema no hará que desaparezca. Si miramos para otro lado, estamos justificando acciones y podemos convertirnos en cómplices del problema. Si reímos las gracias, considerando que son cosas de niños, estamos dándole a nuestro hijo la aceptación de tales conductas.

 

Hay distintos tipos de acoso y pueden aparecer de forma simultánea.

-          El acoso físico es la agresión directa con patadas, empujones, golpes…, aunque también indirecta cuando se producen daños materiales en objetos personales de la víctima.

-          El acoso verbal es el más habitual y quizá el más doloroso. Las heridas que dejan las palabras duelen más que una simple patada. Una herida emocional deja un daño en la autoestima y puede observarse en humillaciones, en motes, en menosprecios en público, en rumores falsos, en llamadas…

-          El acoso psicológico responde a las amenazas para provocar miedo.

-          El acoso social es la exclusión y aislamiento progresivo de la víctima.

Dinámica Zanahoria, huevo o café: Un padre quiso explicarle una enseñanza a su hija. Colocó en tres recipientes diferentes una zanahoria, un huevo y un café. Los tres elementos los echaría posteriormente en agua hirviendo. Los tres se enfrentaron a lo mismo, pero de manera diferente. La zanahoria, tras el agua hirviendo, se volvió fácil de deshacer, débil; el huevo se volvió duro y el café se volvió líquido, como el agua.

El padre quiso demostrarle que todos se habían enfrentado a lo mismo pero nadie responde de la misma manera. Ante una adversidad, eres ¿una zanahoria que pareces aparentemente fuerte pero que cuando te tocan pierdes tu fortaleza? ¿eres un huevo, que aparentabas ser fluida pero ante la adversidad te volviste dura y rígida? ¿o eres el café, que se adapta a la situación y como él al agua, tú te adaptas al nuevo contexto?

Sintomatología del acoso

 

En función del grado de acoso, de la personalidad y del temperamento del niño acosado, puede verse reflejado de diferente forma. Sufrir insomnio, pérdida del apetito, ataques repentinos de ira, agresividad hacia los hermanos repentina, la tristeza disfrazada de enfado, simulación de enfermedad para no ir al colegio, cambio de ruta para ir a la escuela. Hay aspectos más objetivos como llegar a casa con la ropa rota, moratones, un carácter más introvertido.

También destaca el aislamiento, el aumento de la pasividad en casa o en actividades familiares que impliquen motivación. El diálogo que tenga consigo mismo también puede darnos una pista de si hay un problema o no, si se habla a sí mismo como un perdedor, como un idiota. Descenso en el rendimiento escolar, falta de motivación, falta de expectativas futuras.

Debemos tener en cuenta también que estos síntomas pueden darse también por otros motivos. No siempre conllevan esta causa. Además, en la pre-adolescencia comienzan a darse y no determinan ningún tipo de acoso. Por ello, debemos actuar desde la calma en lugar de sacar conclusiones precipitadas.

 

Actuación familiar frente al acoso

 

La víctima de acoso puede ser cualquier niño. Puede ser un niño que saque buenas notas, puede ser un niño que no las saque. Puede ser un niño que lleve gafas y esté obeso, y puede que sea un niño delgado y no lleve gafas.

Cualquier persona puede ser víctima de acoso. No tiene que tener unas características específicas en su personalidad para convertirse en víctima. La actuación de las familias y de la escuela es primordial, tanto en la rapidez con la que se actúa como en el cómo se actúa.

Como errores graves que pueden cometer los padres en el tema del acoso está el pensar que es cosa de críos y restarle importancia al problema. También, creer que esto solo les ocurre a los niños “raros”, dándole una justificación al daño de agresión con la frase “Algo habrá hecho para que otro le moleste tanto”.

Otro error típico es creer que tu hijo va a vivir una situación de este tipo y te la va a contar siempre. Puede que confíe en ti, pero en la mayoría de los casos permanece la vergüenza y el miedo y no es fácil alejarse de esos pensamientos y abrirse con los padres.

Hay padres que actúan desde el papel de la pasividad. Decirle a tu hijo “No te metas en los problemas del otro. No es tu problema, te acabará salpicando”, no es una solución correcta. Ante un caso de acoso o de principio de acoso, debemos actuar siempre, el silencio no soluciona el problema.

Algunos padres pueden confundir una pelea/discusión en el colegio como un caso de acoso. Para que sea calificado como acoso, debe ser reiterado en el tiempo y tener unas condiciones específicas. En cambio, una agresión repentina en el colegio puede responder a algo impulsivo, pero no tiene por qué repetirse en el tiempo. El acoso responde a tratar mal a alguien de forma reiterada, agresiva, humillante.

En muchas ocasiones se da el caso de que los padres desconocen que su hijo es agresor en el colegio. No entienden cómo puede ser que su hijo sea capaz de agredir verbalmente, físicamente a alguien, reiteradamente, si tienen un rendimiento alto en la escuela, si tienen muchos amigos, si en casa se porta bien. Que no sea un perfil claro de agresor no determina que no lo sea. Que no sea un perfil típico de agresor no quiere decir que no sea agresor.

En estos casos, muchos padres tienden a negar lo que en el colegio le comentan preocupados, e incluso pueden llegar a justificar ciertos actos deleznables. Si, desde la escuela, nos reúnen para decirnos que nuestro hijo está agrediendo a otro niño, debemos confiar en la palabra del equipo educativo, ya que son ellos los que conviven con el niño en ese tiempo y quienes han realizado un análisis exhaustivo para confirmarlo. Debemos aceptar la realidad y no negarla. Debemos hablar con nuestro hijo y analizar bien los porqués de los actos reprochables.

 

El acoso se manifiesta diferente en niños y en niñas. Los niños actúan de forma más impulsiva y tienden a agredir física y verbalmente, mientras que las niñas tienden a hacer el vacío, a aislar socialmente, a conseguir que su grupo la excluya. En la adolescencia, los niños y niñas actúan de forma similar, no hay tanta distinción.

 

Visión del agresor

 

Los niños agresores buscan el reconocimiento y la atención de los demás. Aprenden un modelo de relación con los demás que se basa en excluir y en menospreciar al otro. El objetivo es eliminar, amedrentar y destruir a aquel otro que no es seguidor de sus palabras y actos. Destruir al que es diferente y resiste. Destruir a quien le supera, a quien le hace sombra en lo social o en lo académico. Destruir al que en el fondo le hace espejo de sus propias carencias.

Son niños con muy pocas habilidades sociales. Tienen problemas de empatía, falta de culpa y se colocan como víctimas en todo momento. Son cobardes, envidiosos, resentidos, actuando siempre desde la ira o la rabia.

Según varios estudios, se ha relacionado el papel del agresor con familias excesivamente permisivas. Los padres ceden a los caprichos del niño ante la primera pataleta o llanto. No permiten que el niño interiorice la paciencia o el respeto hacia los demás. El niño no aprende en casa dónde están los límites y cómo actuar en convivencia. Son niños que saben dominar porque han aprendido que así se consiguen los objetivos.

Aunque suene paradójico, tiene mucha importancia ofrecer nuestro apoyo y ayuda como padres a nuestro hijo acosador. Debemos hacer una introspección de qué papel jugamos en el asunto y qué motivos provocan que nuestro hijo intimide a otros en el centro. Adquiramos un papel activo.  Debemos colaborar y ayudar para encontrar la forma y la conducta positiva que debe aprender. Ayudar a que se repare el daño que ha causado en la víctima, que aprenda a actuar desde la solidaridad.

Que nuestro hijo sea acosador no quiere decir que su personalidad sea problemática. Su forma de resolver los problemas es problemática. Debemos actuar de manera precoz y no dejar que nuestro hijo solucione esto sin nuestro apoyo y ayuda, ya que una solución errónea puede provocar que en la edad adulta se agraven las conductas negativas hacia los demás.

 

Visión agredido

 

El perfil de agredido responde a una personalidad introvertida, insegura. Hay baja autoestima, el niño se siente incapaz de salir por sí mismo del problema. La situación puede superarles y puede introducirles en una profunda tristeza. Son niños con pocas habilidades sociales y con un cierto nivel de rechazo en el grupo. Todas estas características propician que el agresor analice que es un punto fácil. El agredido no dispone de recursos o herramientas psicológicas para enfrentarse al problema.

Son niños con un apego excesivo, aunque no se da siempre así. Hay casos de agredidos donde tenía cualidades totalmente normativas.

Muchos padres sienten sentimientos de culpa por no haber detectado este problema antes. La realidad es bien distinta. El niño que sufre va a intentar que no lo notes para que no sufras por él. La vergüenza y el miedo es muy poderoso. Un niño que sufre agresiones continuadas, va a intentar ignorar el problema sin tu ayuda y solo te la pedirá cuando no pueda esquivar más la situación. Tu papel y tu función como padre es brindarle la ayuda desde donde él te permita actuar, desde la empatía y desde el apoyo.

 

Visión de los espectadores

 

El papel del espectador influye en el acoso. Participan de forma activa o pasiva en él, guardando silencio. Ese silencio puede provocar que observen la violencia como algo natural, corriendo el riesgo de perder sensibilidad ante agresiones cotidianas y no saber actuar antes situaciones injustas.

 

Actuaciones familiares que pueden propiciar el acoso

 

La familia es la responsable de la educación y de la transmisión de los valores, junto con la escuela. Es nuestra función que nuestros hijos tengan conciencia de sus derechos y obligaciones y sepan respetar a los demás. Por ello, debemos ser firmes y saber poner límites en nuestras acciones. Solo a través de los límites el niño aprenderá a diferenciar el bien del mal.

Actualmente, hay una tendencia creciente al miedo a los límites, sin saber que no establecernos determina lo perjudicial. Si nuestros hijos no aceptan normas básicas ahora, en el futuro no sabrán aceptarlas y tenderán a actuar continuamente desde la ira y la rabia para conseguir los objetivos.

Respecto a los límites se encuentra el permitir ver ciertos programas televisivos, películas o juegos excesivamente violentos, sin que medie nuestra opinión crítica sobre ellos. Debemos establecer un diálogo sobre estos temas con ellos. Las nuevas tecnologías y los medios de comunicación han facilitado la exposición a la violencia sin ningún tipo de filtro y, lo peor, sin comentarios posteriores que les ayuden a nuestros hijos a entender la agresividad de lo que observan.

Para evitar la probabilidad de que nuestro hijo sea agresor o agredido, debemos trabajar con ellos la seguridad emocional y física. Debemos enseñarles a hacer frente a las intimidaciones en su estado más precoz.

Como padres podemos enseñarles a trabajar estas ideas mediante juegos, lecturas, ideas que muestren valores. Ideas que ofrezcan la importancia del compañerismo, la solidaridad, el apoyo, la asertividad.

Es muy importante que cedamos nuestra mano y ayuda al centro. Varios estudios refieren que hay relación positiva entre la ayuda complementaria de la escuela y la familia y la reducción de los casos de acoso escolar. Continuemos mejorando y creciendo juntos para mejorar el desarrollo emocional e integral de nuestros hijos.